El Diseño Original De Dios #BanaDevocional
Muy a menudo la gente se encuentra en el laberinto de la vida tratando de actuar y lograr los estándares que la sociedad impone.
De cualquier forma esos estándares no son compatibles con el nivel de individualidad que Dios puso en cada uno de nosotros, los estándares de Dios para lograr la verdadera plenitud, paz eterna y satisfacción que perdura, son sustituidos por los estándares de la sociedad en cuanto a riqueza material, reconocimiento público y estatus.
El estándar del éxito y logro que define la sociedad nunca será suficiente para la plenitud verdadera y paz eterna. Solo encontramos éxito verdadero cuando nuestros logros vienen del diseño original de Dios para cada uno de nosotros.
El éxito no depende de la opinión de los demás, no es con los estándares de la sociedad, no se basa en riqueza material ni en buenas acciones. El éxito empieza con lo que tenemos dentro de nosotros. Se define por lo que estableció Dios para nuestras vidas y al poner esto en acción las fronteras del éxito verdadero son ilimitadas.
No somos exitosos sólo porque alguien más lo diga, ni por vivir a la expectativa de los demás. Nos convertimos en dependientes de las opciones de los demás al vivir basados en los estándares de actividad de la sociedad.
No vivan con los criterios de este tiempo presente, al contrario cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios; es decir, lo que es bueno, lo que es grato y lo que es perfecto Romanos 12: 2
De cualquier forma esos estándares no son compatibles con el nivel de individualidad que Dios puso en cada uno de nosotros, los estándares de Dios para lograr la verdadera plenitud, paz eterna y satisfacción que perdura, son sustituidos por los estándares de la sociedad en cuanto a riqueza material, reconocimiento público y estatus.
El estándar del éxito y logro que define la sociedad nunca será suficiente para la plenitud verdadera y paz eterna. Solo encontramos éxito verdadero cuando nuestros logros vienen del diseño original de Dios para cada uno de nosotros.
El éxito no depende de la opinión de los demás, no es con los estándares de la sociedad, no se basa en riqueza material ni en buenas acciones. El éxito empieza con lo que tenemos dentro de nosotros. Se define por lo que estableció Dios para nuestras vidas y al poner esto en acción las fronteras del éxito verdadero son ilimitadas.
No somos exitosos sólo porque alguien más lo diga, ni por vivir a la expectativa de los demás. Nos convertimos en dependientes de las opciones de los demás al vivir basados en los estándares de actividad de la sociedad.
No vivan con los criterios de este tiempo presente, al contrario cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios; es decir, lo que es bueno, lo que es grato y lo que es perfecto Romanos 12: 2
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal