¿Amas De Verdad? #BanaDevocional
Hay algo muy triste y casi generalizado y es que casi nadie tiene el interés de amar, la perspectiva común es que la manifestación de amor está condicionada o sea, para otorgar amor es necesario que se me proporcione de igual manera, pero incluso ni así damos el amor proporcionalmente.
Estamos tratando el amor como una inversión, como si fuera un negocio en el cual invertimos esperando resultados beneficiosos y si no estamos seguros de que será de provecho no hacemos esa inversión, por eso no brindamos amor sin que se nos ofrezca amor a cambio.
El amor de Dios es diferente, nos ama con amor eterno, amor que nunca ha esperado nada, nos entregó a su hijo y este acto sigue siendo ignorado, pero Dios insiste en amarnos, aún cuando incluso le herimos.
Muchos hemos dado amor y no lo hemos recibido a cambio, pero amar a la onda de Dios, es amar, es entregarse, es darse sin esperar nada a cambio, es como Dios, insistir solo teniendo la satisfacción misma que genera el amar.